Un apunte histórico. Felipe el Hermoso, primer Habsburgo de Castilla.

Hoy hace 502 años que falleció Felipe I de Castilla, que no de Aragón, en Valladolid. Felipe I el Hermoso (no sé dónde veía la reina Juana la “fermosura” si miramos los retratos contemporáneos) fue, mucho antes que rey de Castilla y León, archiduque de Austria, duque de Borgoña, de Brabante, de Luxemburgo, y de Limburgo; conde de Borgoña, Flandes, Artois, Henao, Holanda, Zelanda y Tirol; señor de Malinas y algunos títulos más que sería tedioso enumerar. Por lo tanto, era uno de los gobernantes más poderosos y ricos de su tiempo. Aquí se pueden ver sus ostentosas armas.

No fue demasiado popular entre sus súbditos castellanos por favorecer a sus cortesanos borgoñones y flamencos, ni por el trato que daba a su esposa, a la que intentó incapacitar para poder ejercer él el poder en Castilla, cosa que no consiguió de las Cortes de Valladolid, pero que no impidió que gobernase de facto. Tampoco parece que le gustase demasiado a su suegro, el muy Católico rey Fernando II de Aragón, que no debió de llorarle mucho cuando falleció. Es más, dicen que le mandó envenenar para volver a ser regente de Castilla, aunque la versión oficial fue que Felipe el Hermoso, después de jugar a pelota, acalorado como estaba, bebió tal cantidad de agua helada, que enfermó y murió, un 25 de septiembre de 1506.

Imagen: Juana la Loca ante el féretro de Felipe I (Fco. Pradilla)

Este personaje de la historia, es recordado sobre todo por lo mencionado más arriba, y quizá por ser un mujeriego, atormentando a su esposa hasta la locura. Yo, le recuerdo más por todos aquellos infantes que engendró, y que diplomáticamante fueron de gran utilidad al primogénito: Carlos I de las Españas y V de Alemania, cuya biografía es más conocida y desde luego mucho más extensa e interesante que la de su padre.

Imagen: Díptico de los descendientes de Felipe I y Juana I